Metamórfica
Podríamos decir que toda nuestra vida está “al alcance de nuestras manos”, o a “un paso de nosotros”, y serían expresiones ciertas aunque quizás no comprenderíamos su sentido.
En los pies, manos y cabeza, encontramos todo el proceso desde antes de encarnar hasta el momento del nacimiento.
Allí se posicionan vivencias importantes que de forma inconsciente nos condicionan.
Si fui deseado, si mis padres sintieron ilusión o enfado al tenerme, si el acto de concepción fue en un entorno de amor o no, si durante el embarazo mamá se sintió sostenida por papá, segura…
Si el parto fue natural o cesárea, si fue en un entorno agradable o tenso.
Todo ello va a influirme en mi vida actual. Quizás haciéndome ser alguien inseguro, que me cueste empezar proyectos, que sienta que no encajo o con miedos.
Que pierda la conexión con la intuición o que tenga un pánico irracional a la muerte.
La técnica metamórfica es una suave caricia que se aplica en pies, brazos y o cabeza.
El terapeuta busca ser lo más neutro posible, para que simplemente sea un canal, por el cual fluya lo necesario para que el paciente encuentre de nuevo su equilibrio, eliminando aquellas memorias de vivencias que lo condicionan.
Las sesiones son muy agradables y relajantes, cada paciente libera solo aquello que está preparado a liberar.